viernes, 30 de noviembre de 2007

Fondo y Forma

Estoy cada vez más convencido de que lo realmente importante para hacer poesía es, sencillamente, tener algo qué decir(me). Tan simple y tan difícil, y tan peligroso. La forma que el poema adopta es más bien azarosa y puede ser muy variada. Multiforme. Qué decir, con qué problema, fantasma, urgencia, miedo o constatación, nos enfrentamos es lo esencial. El sentimiento, al igual que la forma, se dejan llevar por esa retorcida y oscura iluminación. No nos engañemos, que la lucidez del poema suele ser tenebrosa y escalofriante. El poeta enfrentado en la más absoluta soledad con el Universo entero durante unos instantes. El Universo que se mostrará opaco y sorprendentemente significativo; cruel y despiadado para una conciencia indefensa. El poema es siempre una derrota, la afirmación religiosa de una derrota. Otros dicen que se trata de anticipar la muerte. Será eso. Es atractiva esa macabra soledad omnisciente del poeta inspirado. Por eso, una y otra vez buscará el poeta reconquistar esos mágicos momentos de la verdadera creación. Mientras, divagará, holgazaneará y hará maravillosos juegos del lenguaje y de la memoria. Todo como preparación del encuentro sobrecogedor y excitante del siguiente gran poema. Es peligrosa la verdadera creatividad porque te muestra la verdad innegable de la Muerte y la Infertilidad radical de todo cuanta hay y pueda haber. El miedo y el cansancio, gota a gota, van minando el altivo corazón del poeta hasta desintegralo... ¡Pero siempre, oh humanidad, pensamos que aún queda algún poema que descubrir, algún instante de extática y fugaz felicidad por alcanzar!.

Primitivo

Primitivo, pasional, colectivo... hijo del lenguaje. El lenguaje como metafísica, como religión... el lenguaje como la única posibilidad de todo aquello que nos parece tan 'elevado'. La historia y la sociedad también son destilados del lenguaje. Intermediarios hipostasiados. ¿Consiste esto que estamos llamando 'el lenguaje' en algo distinto y previo a la gramática...? Indagar el concepto metafísico (¡poético!) del Lenguaje.

Estética poética

Tal vez sea la felicidad uno de los más importantes criterios del poeta para escribir esto o aquello. Tal vez no sea la felicidad, llamémosla así o de cualquier otro modo -¿satisfacción, olvido...?- tal vez no sea la felicidad el único canon para el poema, pero indiscutiblemente ésta es importante.Uno, pero no el único, de los problemas que esta estética provoca es el desgaste, el vaciamiento o aburrimiento del poeta por mor de la monotonía a que se ve abocado en ese frenesí en pos de la felicidad creativa.La felicidad comno meta de estética produce la infelicidad y desazón estéticas, el agotamiento del alma del poeta.De Arhur Host son estos tres poemas que mostramos. De algún modo son bellos y válidos, pero ha surgido ya a la sombra de la esterilidad. ¡Nuevos rumbos tras ellos, ese es el reto inmediato!

Una geográfica del alma de todos los hombres
y que a mí a ti nos incumba.
Una geográfica tardía que penetre brutalmente
en los más íntimas cavernas del deseo y la esperanza
y que nos traiga la ardiente verdad de la médula de la especie.
Una geología y una biología del alma acabada,
y del alma sin hacer a la que nada afecta.
Socavar al modo de los antropófagos nuestras intimidades
más vergonzosas para que sean festín, en noche de luna roja,
de los ciegos y los héroes. Un alma del final de los días,
otoñal, y que se haya medido a todos sus tiempos,
segundo a segundo, hasta llegar al supremo instante
de su vaciamiento, que como última hoja deja morir
bellamente la última promesa y el último verso.

*****

Noche cerrada. Noche ejerciendo de noche, de negra noche.
El olvido. Desterrada la memoria entre la nieve azul
que se derrama muerte y otras formas y otras sombras.
Noche de luz y noche de frío, de más luz y más frío
cuando la atroz nevada cesa y muestra toda la luz
y todo el frío desnudos sobre la noche más negra
adentro de heladas y absortas pupilas.
Sea la sombra o sea su reflejo en las pálidas estrellas
que atrae como imán todo el tiempo habido
desde el primer hombre a tus insuficientes ojos.
Viento. Se derrama la memoria. El éter eterno es testigo,
y la vida a golpe de fuego que se aborta a cada paso
para caer de bruces en la mirada más fría y más oscura.
Destierro, en el denso mundo, opaco sin nombre, breve.


*****

Otra alma con un nombre más pequeño.
Un corazón con una luz y una fuerza de hombres.
Más joven y más antigua que el alma cristiana;
(fémures cruzados, crucificados, entre esputosteológicos
y besos teológicos y semen teológico). Un alma que no nazca
muerta ni condenada desde toda la eternidad
(que es un concepto y un lugar imposible y malsonante).
Un alma que anide en mis huesos y que esté más acá
de todos los dioses de sangre y de todos los pecados
de sangre y de todo el sangriento amor
de que es capaz el amor más iluminado y blasfemo.
Otra alma, otra voluntad, otra inteligencia, otra vida,
más justa que no se avergüence de sus gritos, de su dolor
y de sus dudas; un alma que no sea castigada
por tener miedo y por tener frío y por no creer en ningún dios
de más allá del frío y del dolor.Un alma más a propósito
del hombre, más a propósito de ti y de mí, que somos,
reconozcámoslo, la única realidad.

jueves, 29 de noviembre de 2007

Añoranza de Ítaca

Añorar la añoranza, cuando Itaca se desdibuja inevitablemente. Cuando Ulises llegó a Ítaca. Cuando deseó zarpar nuevamente en busca de Ítaca, y odió a Penélope y a Telémaco y a aquellas empobrecidas tierras. Ítaca fue un sueño, una necesidady una voluntad de vida, pero Ítaca tiene un final, siempre lo tiene. Ítaca es el signo de la mayor tristeza, porque ninguna Ítaca ni ninguna travesía sacian nuestra inmortal mortalidad, nuestra homicida insatisfacción. Ninguna Ítaca será ya, para algunos, Ítaca, ni es posible una Nueva Ítaca. Ítaca está en nuestra mente, en nuestro corazón, y por eso, dolorosamente la sobrevivimos. El encolerizado mar hundió nuestra nave y nos dejó náufragos agarrados a sus despojos. Sin fuerzas para nadar y sin fuerzas ni voluntad para dejarnos arrastrar hasta el fondo del océano.Ítaca, vacía y atractiva fue nuestra voluntad de libertad. Vacía y muerta, es la voluntad moribunda a la sombra de un Dios muerto. Ítaca fue un feliz estertor, pero su nombre, su recuerdo, ahora, hace más daño que la propia vida sanguinaria de donde undía nos hicieron surgir. Hoy Ítaca es sólo un fatal recuerdo. Ítaca, que fué la inmortalidad, la belleza y la paz de la infancia.
El poeta sufre cuando habla, y sufre cuando está mudo. En ambos casos una sed maldita te innunda y te arrastra afuera de ti hasta el suelo, hasta el subsuelo más infecto.Vivir en la cueva de los filósofos y los alquimistas, expulsándolos previamente.

120 m2 de oscuridad y Vida. Miles de libros recordándote tu propia estupidez... los no leídos por no leídos y los leídos por eso mismo.No hay más fantasmas que aquellos que nos atormentan. Pueden ser muchos o pocos, o todos el mismo, y tal vez el mismo para todos, pero son siempre invencibles.

martes, 27 de noviembre de 2007

Algo así

Decidido. 'Jakob von Gunten' y el Törless. Relecturas obligatorias, haciendo tiempo para la poesía.

Pensar, sentir, desear, son formas humanas deficientes, pero son las que hay. No hacen justicia ni al alma ni al Universo. No arañan ni respetan el Enigma, la abismal certeza.

Buena música. Alan Parson. Placer y miedo. Mala conciencia. Banalización del alma, cansancio. Cinismo perverso, autodestructivo.

No hay salida, no hay lugar.

Cambio a Paco Ibáñez. Buenos poemas. Existenciales (la sociedad, España, el Tirano, la guerra fratricida, son el propio alma).

Cernuda y León Felipe. Arthur Host mudo, agotado. La poesía es un ímpetu lúcido que nos arrastra e inflama. La poesía es también una oración. también, un acta de defunción, o mejor, un agónico apagarse sin haber entendido nada. Sin haber vivido nada, pero esto no tiene ninguna importancia. La experiencia no es nada, y en cada instante pueden contenerse todos los demás.

No son posibles los libros de poesía. Son demasiado lógicos. No es posible la poesía sobre la poesía, que en el fondo es un agotador plagio.

lunes, 26 de noviembre de 2007

Dudo entre 'Hijos sin hijos' de Enrique Vila, ' 'La invención de Caín' de Azúa, 'Última sangre' del mismo (pero esto es más serio), y 'Creación' de Gore Vidal. ¿Es el momento, dramático por sus no consecuencias, de releer 'El lobo estepario'?; tanto si me afecta como si no, quedaré afectado. Si me afecta, en mi dolosa y cínica afectación, tomaré aire e impulso adentro de mi burbuja; lo de siempre. Si no me afecta, si descubro una dulzura insufrible o una ingenuidad escondida, si tanto me he endurecido (sin motivos, aunque siempre hay motivos) habrá caído, de alguna forma y en algún lugar, uno de mis referentes. ¡Creo que los psicólogos llaman a esto introyección!
Decidido, leeré el PaíZ. ¡Bárbaros felices!

Vano

Todo es vano. ¡Vaya descubrimiento! Tenerlo en cuenta no una, sino en todas las ocasiones -las oportunas y las inoportunas- es terrorífico. Menos mal, como diría el gran catador de Edimburgo, que nuestra naturaleza es más sabia que nuestra alma.

Una sociedad inerte y autocomplacida sólo puede degustar intelectuales de este tipo. Alguna relación ha de haber entre el Genio, o el Maldito, y la Opinión Pública, que en definitiva es su público y su cliente. Es muy difícil oponerse al Amo que te dicta las leyes de tu fingida libertad y cretividad, mas resulta imposible seguir a tal Señor cuando ni él mismo sabe lo que desa, más aun, no sabe desear. Por esto, nuestro 'genios' son productos afortunados de la publicidad.

Aunque algo de esto también hubo de haber en la época del Romanticismo. Al siglo XIX lo salva el desvergonzado lucimiento de lo sentimental y lo trágico. ¿Qué queda hoy de aquello?

El sociologismo y el historicismo -inevitables en la conciencia actual- matan al individuo, matan el pensamiento, matan el Arte.

El grado de honestidad y de lucidez son directamente proporcionales. La honestidad puede mastrarse de varias maneras. ironía, irracionalidad, silencio, erudicción, misoginia o incluso, en sus más bajos momentos, felicidad.

Un alma vaciada, un alma satisfechamente imbecil, o incluso una conciencia del Misterio que no se sienta realmente afectada, no necesita experimentar el desgarro del mundo. Para ella el mundo será un lugar plácido o aséptico. Los otros espíritus, los más desolados y que no han pasado la línea salvífica de lo metafísico y moralmente establecido, estas almas sí necesitan y descubren el Universo como un Gran Erial. Todo es vano, ya te digo.

domingo, 25 de noviembre de 2007

Contabilidad

Llevo pendientes varios asuntos. ¡Bendita pluralidad dispersadora que nos descansa de lo más esencial...! Algún comentario sobre la Religión, algunas reflexiones sobre el arte -el expresionismo y la imagen maldita del artista-, algo sobre mis últimas lecturas (ya sabéis, Azúa, Vila Matas, León Felipe...), alguna anotación de servilleta, y recordar algún que otro encuentro con Arthur Host. Demasiado. Ya veremos.

sábado, 10 de noviembre de 2007

No y Caos

La Literatura del No tine una extensión en la del Caos. Un ingrediente caótico tiene la vida, cada existencia y así ha de aparecer en la Literatura. Un riesgo se cierne cuando se confunden Caos y Negación, cuando se olvida el escepticismo y distanciamiento ante el Vacío. Se cae -como a veces le ocurre, por ejemplo, a Gombrowicz- en un cierto esteticismo afectado y hasta falso, en un evasivo histrionismo, que termina por alejarnos de la autenticidad que a la Literatura podemos exigirle. Se sustituye la paciente y poco espectacular introspección con el bodeville disparatado que tan infértilmente llena páginas y páginas, almas y almas.
Estilísticamente, a la Literatura del Caos, como a la del absurdo o a la de ciertas vanguardias, hemos de agradecerle algunas figuras y relaciones textuales atractivas. Un buen nejemplo de Caos dentro del No es la paradigmática novela de Hesse 'El lobo estepario'. Sus últimas páginas, caóticas, absurdas, surrealistas, adquieren sentido porque previamente hemos conocido la honestidad y lucidez de Harry.

viernes, 9 de noviembre de 2007

Libro no recomendable

De Vila Matas 'Una casa para siempre'. A trozos, sin ganas. Ninguna de las historias resulta ni original (esto es lo que menos importa) ni atractiva (¡leso delito en libro tan pequeño, 140 en holandesa y letra grande). Posiblemente una novela fallida. Para más inri, la contraportada, de quien sea, engaña y disfraza de 'hermosa, culta y literaria' este aburrido borrador. Tres perlas aprovechables, hecha la inversión, que el tiempo y el dinero menudean.
Las novelas de formación -incluso las de final no feliz- son todas falsas pues, dice Vila Matas, la experiencia nunca enseña nada. Contundente malabarismo lingüístico para decir, creo yo, que enseñan, precisa y exactamente, eso, Nada. El distanciamiento, el fragmentarismo (literario y vital) sólo es decente desde la formación/deformación. ¡Para estar de vuelta hay que haber estado de ida!. En fin, la frase de Matas, un exabrupto retórico.
Segunda lindeza. 'Cuanto más desgraciado es uno, más posibilidades tiene desarrollarse artísticamente'. Conforme, bien dicho. Pero inmediatamente hace Vila Matas el siguiente comentario, a modo de conclusíón lógica: ' esto demuestra que la creación es imperfecta'. Pienso que ambas afirmaciones, la segunda una tautología, están desconectadas y que así han de mantenerse, sino queremos incurrir o propiciar un desfondamiento o rendición explícitos de la Literatura. Recuerde Vila Matas que la alternativa a la Literatura no es el silencio comunicador, sino la barbarie burocrática y primaria.
Tercero. Aquí si acierta Don Enrique. 'Todo lo que pensaba me parecía inútil expresarlo, puesto que ya lo había pensado. Y para colmo perdía el hambre. Y no digamos las ganas de escribir'. Esto es cierto. Este agrafismo honesto siempre nos atenaza, y sólo unas líneas escapan, de cuando en cuando, de tan dura cárcel.

Casares

Definición de cretino. 1. Detención patológica del desarrollo físico y mental. 2. Estupidez, imbecilidad. ¡Cuánto me gustaría ser declarado non grato en Casares!

Agotamiento

Definición deconstructiva del agotamiento. Para ser feliz sin caer en la imbecilidad hay que tener mucho valor. Tanto, que la felicidad no importa y hasta sobra.

martes, 6 de noviembre de 2007

Azúa Ciudadano

Hoy entrevistan a Azúa en la prensa escrita. Más avejentado en las fotos. Es normal (Barcelona 1944). Sus respuestas son acertadas, en su tono ciudadano e ilustrado. Sin embargo me ha quedado un poso triste al comprobar la 'actualidad' y superficialidad de las preguntas; todas en torno al catalanismo cerril (disculpen la tautología) y al Presidente Rodríguez. Lo más decepcionante ha sido que Azúa ha entrado encantado, o así parecía, al trapo, y que sin salirse un ápice de lo esperable en una oveja negra no ha hablado de otras cuestiones más profundas (de psicología, literatura, filosofía...) que no sólo resultan más interesantes para sus lectores sino que son la clave de su sano antinazionalismo.
Me hago el firme propósito de releer sus poemas ('Última sangre') antes de entrar, si acaso, en 'Ovejas negras'.
Una forma posible de Literatura, hasta donde la Literatura es posible y deseable -a medio hacer entre el sentido común y la religión- es la novela de formación. Formación/deformación. El protagonista va alcanzando una exhausta lucidez, o va realizando su dificultosa existencia a partir de dicha comprensión más radical.

domingo, 4 de noviembre de 2007

Vila Matas 2

Los Bartlebys son esos seres en los que habita una profunda negación del mundo. Son felices, a su modo. No son necesariamente infelices, al menos. Hay tantas formas de negar la literatura como escritores. Rastrear el laberíntico universo de la renuncia lingüística es la única manera de ejercer, quién sabe con qué consecuencias, la Literatura. El siglo XX es, indiscutiblemente, el del No literario. No se trata de un vacío esteticismo sino de un habitar el más iluminador -y aterrador y gratificante- vacío que se haya al centro, si así es posible hablar, de la conciencia y de nuestra tradición. Es una dorada jaula allende de la cual no hay más que ingenuidad o dogmatismo.
Todo acto creativo consciente es infinito en sus exigencias. Es paralizador. La imagen de un centro sin referencias. La imagen de una ciega pulsión, ajena al bien y al mal y a la libertad, que se afana absurdamente entre los segundos implacables y la Literatura no menos lapidaria. No existe más que el aforismo; algunos de miles de páginas.
Los motivos vulgares para la agrafia no me interesan.
La Literatura se alimenta de la Literatura; ¡carroñeros! ¡incansables buscadores! ¡escépticos viajeros Literarios, autores y actores de sus particularísmas obras!
Hablar, escribir, leer, es pactar con el sinsentido del mundo; es asumir sin hacerlo lo absoluto y lo inabarcable. El misterio de que haya algún misterio. La desfachatez altanera o compasiva de la conciencia.
Callar, malvadamente, también es pactar. Quien calla, quien honradamente guarda silencio, como Wittgenstein anunció, incurre en el fraude de saber qué y cómo callar. La suficiencia y dogmatismo de la conciencia se manifiesta hasta cuando decide no comunicar. No comunicarse, no decirse. Un escritor que no escribe es un monstruo que invita a la locura, Kafka dijo.
El último escritor, necesariamente, será un escritor del NO. Verdad vertiginosa, paralizante; cada uno, en su momento, será el último escritor.
El Silencio de antes de la modernidad, de antes de Occidente, de al margen de Occidente...

También es bello el libro de Vila Matas, aunque horrendamente peligroso, por la de lecturas, laberínticas, a las que invita: Lélut, Barthes, Wittgenstein, melville, Borges, Chanfort, Hawthorne, Schwob, Janouch, Mariere, Kafka, Musil...

sábado, 3 de noviembre de 2007

Vila Matas 1

Una mala influencia me ha llevado a Vila Matas. Arrastro renqueante 'Testamento' de Gombrowicz. Esto es lo de menos. De entrada, 'Bartleby y compañía' no es mal libro. Buen estilo y sugerente. Tampoco excesivamente pretencioso. El tema, la Literatura del No, interesante y dentro de mi radio de acción. Más abajo, u otro día, comentaré cosas más en concreto, pero ahora sólo recordarme mi animaversión a los Vila Matas que nuestro desértico suelo ha producido, y que tan talluditos y lozanos se mantienen.

Vila Matas pertence, y ha ejercido -desconozco si aún lo hace- de Anagrama militante. Me explico, aunque me temo que mi explicación será un tanto confusa y enredará temas aparentemente dispares y sin, como se dice, venir a cuento. Serán, no lo duden, mis nobles perjuicios. Les cuento.

Existe en España una minoría provinciana y mediocre altamente sobrevalorada por motivos políticos y económicos. Saber que Vila Matas publica con Anagrama, sabiendo y habiendo leído al caporal del oportunismo que la conduce, en nada ayuda a acercarse a nuestro autor. Posiblemente, las muy justas críticas a Herralde las he extendido a toda su pléyade. Lo reconozco, pero algo de verdad también habrá en lo que digo.

La inteligencia divina catalana -que no es ni inteligencia, ni divina ni catalana, que es superficial, mezquina y universal-, el divino nacionalismo satisfecho y obeso, produce o encumbra a autores autóctonos políticamente correctos, esto es, dóciles a los podridos vientos del estercolero bunquerizado, nacionalista ahora, otrora cualquier cosa. Cuanto menos, casi ninguno ha huido avergonzado; tal vez Azúa. Sus tesis artísticas y filosóficas son, topificadas, las de la literatura europea y norteamericana que les llega y difunden more castizo chulapo. El único argumento en favor de tal tautologica desfachatez es que son publicados... por sí mismos, evidentemente. Mientras España produzca refritos edulcorados felizmente cobijados por el momento político (léase victimismo subvencionado y pirata), mientras España sea un erial provinciano y autosatisfecho, Anagrama no se hundirá. Sabía muy bien el franquismo -como ahora lo sabe el neofranquismo catalanista- en qué bien acicaladas y poco sufridas manos dejaba la oposición y el mandato de ser futuros guía de no pocos. Hoy están encaramados a los Ministerios y las Consejerías. La izquierda divina es -y hablo en presente pues en Anagrama aún sobrevive, aunque disfrazada de lo que la actualidad política requiere- los divinos progresistas son gente, les digo, muy bien situada en lo económico y social. Su mérito no es de ellos sino de sus padres y abuelos (y de los abuelos de sus abuelos...) que les mandaron, como señoritos que son, a los mejores colegios y les mantuvieron en la estúpida y costosa burbuja de las palabras huecas y las copas de qüisqui en la mano. Les enseñaron a los Herraldes y compañía a ejercer de señoritos. Esa es la verdadera función de Anagrama y sus bien pagados intelectuales. Los secundones, como antaño, no heredan la tierra o la fábrica, sino que son plantados en los monasterios, ciertas editoriales de ahora, con la misión sagrada de rezar y mantener el buen orden, tan satisfactorio para la familia y los futuros vástagos.
Por lo que llevo leído de 'Bartleby...', que no es mala mano, lo siento por Vila Matas, un amanuense de calidad, o como otros dirían, un tonto útil.