He estado unos días fuera de combate. Por motivos físicos, por estúpidos e innobles motivos que no vale la pena relatar. Puede que aún lo esté y esto sea un breve espejismo. Nada, nada he podido leer (un pelín del pesado y mixtificador progresatisfecho del Conte) ni tampoco escribir (apenas tres servilletillas que no quiero abrir y que posiblemente tire).
En otro ámbito, arrastrándome, liado con Nietzsche... ¡esta va a ser buena! No tengo ni idea de cómo lo voy a comentar. Tiraré, supongo, por la vía fácil de manual. Mis jóvenes acompañantes no sufrirán más que de costumbre, aunque yo, sólo para mí, pasaré una inmensa vergüenza por mi ineptitud.
Pd no esperada: ¡no toméis bupropión!: aunque no lo diga el prospecto provoca insoportables espasmos y contracciones abdominales. Ahora me tira más lo de la apicultura, acupuntura (con hierbas y yin y yan) quise decir.
martes, 27 de enero de 2009
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2 comentarios:
Compay, ¿qué es?, ¿el virus o el bupropion? Oye, a ver si me contestas lo de la ópera, que no lo pillo. O sea que me concretes, que nietzscheanamente me interesa. Por lo demás yo ontológicamente fatal, ónticamente hecho una mierda.
'Compañeros¡
Lo de la ópera, según 'El nacimiento de la tragedia en el...', te comentaré lo que pueda en una entrada.
Para m. yo. ¡Hasta voy de médicos!
¡Asco vida!
Abrazos.
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