miércoles, 30 de abril de 2008

Aquí estamos...

Felizmente ágrafo. Leyendo mastodontes inservibles y además los 'Diarios' de Kafka. 'La decadencia de Occidente', sólo para para poetas... igual que 'Los Héroes' de Carlyle. El Heródoto es un placer.

Cada vez más alejado de Carver. Mejores, Fante y Bukowski. Es sólo cuestión de estilo. Mi anhelo expresionista y maldito determina mis lecturas. Gritar y el Silencio: entre medias siempre las palabras y las micro historias, pero sólo entre medias y no en la raíz. ¿Raíz...? No, ahora no me paro a pensar.

Una sujetividad cansada que se niega a decidir la máscara más apropiada. La no-máscara para que el juego de los espejos continúe.

Derrota y compasión. El poeta maldito que en vez de vender esclavos etíopes ve pasar la vida descrfeido y entre libros. Otra vez a las puertas del Jardín. ¡En el Jardín hay que hacer reformas! Ego sum qui sum.

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