Después de la lectura del libro 'El terrorismo y us etiquetas' de A.Espada, llegué a las siguientes conclusiones, todas ellas puntos para la reflexión y el sentimiento:
1. No debe haber punto equidistante entre los Derechos Humanos y la singularidad de todas y cada una de las culturas. Que esta falacia, llámese por ejemplo Alianza de Civilizaciones, muestra el raquitismo moral e intelectual de algunos. El buenismo ramplón, por muy bien publicitado que esté, es peligroso. Un poco más allá; ningún dirigente político practica el buenismo tontorrón por convicción sino sólo con el evidente interés de perpetuarse en su cargo, o lo que es peor de SALVARNOS A TODOS.
2. Por particularización de la segunda, o más bien por generalización. No hay punto intermedio entre la víctima y el verdugo. Sólo quien interesada e inmoralmente no distingue a ambos vocifera sobre esa indigna paz del cementerio.
3. El terrorista es un 'asesino chiflado', no un igual. "El terrorismo vasco es incapaz de levantar por sí solo otra solemnidad intelectual que no sea la del chiflado en busca de sus víctimas. El orden y el sentido, es decir, lo más repulsivo de la enfermedad, lo procuran los demócratas, destacadamente los presuntos. Ellos, los que proveen de fines al terrorismo, los únicos que pueden decretar su fin."
4. Hablar de causas del terrorismo es casi siempre un eufemismo ilustrado del inmoral y antiilustrado hablar de causas 'que justifican' el terrorismo.
5. "O las mentiras periodísticas [y políticas, digo yo] pasan por el Código Penal o acabarán pasando las verdades." Esto va más allá del tema del terrorismo, y creo que aquí está en juego la posibilidad misma de la no animalidad humana.
6. No hay mayor victoria para el terrorista y para quien lo 'comprende' que el ninguneo, silencio, apartamiento o anonimato de las víctimas. Es su triunfo supremo más allá incluso de que se hayan conseguido o no los fines que se pretenden. La barbarización de la sociedad.
7. "Es cierto que lo contrario de la guerra es la paz. Pero lo contrario del terrorismo no es la paz. Es la Ley."
8. "Hay quien [estúpida o interesadamente, o ambas cosas a la vez] espera cambios en la moral del que dispara: yo prefiero ocuparme de la moral del que sufre."
De este libro de Espada (Espasa, 2007), son especialmente destacables las páginas 64 a 66 que bajo el epígrafe 'Islamismo' reproduce una carta de un grupo de intelectuales, también musulmanes, al respecto del riesgo integrista; se trata en definitiva de esta disyuntiva: o la intransigencia integrista o la democracia y los derechos universales.
También vale muy mucho la pena leer el capítulo 'La tragedia demediada' donde se critica el macabro simplismo del documental 'La pelota vasca' de Medem. En la película, al menos la mitad de los ciudadanos vascos no están representados. Es un largo, pero muy corto, de la otra mitad, la que no sufre el acoso nacionalista ni terrorista. "El Euskadi nacionalista aparece como un lugar inclemente donde la testuz sustituye al cerebro y donde amor se escribe con hacha. Ven y cuéntalo."
domingo, 2 de marzo de 2008
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